Crónica de Andrea Mogrovejo:
Son las 6:15 am de la mañana cuando después de dar unas vueltas por mi
casa y desayunado, llego al punto de encuentro a la entrada del inter, zas!!! ,
llego a las justas cuando ya estaban partiendo, somos unas 7 personas pero de
seguro más adelante por el grifo se nos unen más. Partimos y hacemos buen
tiempo hasta el grifo donde ya surgen otros
y ya somos como 15 , todos estamos muy animados pues para unos es la
primera vez que van a conocer el sitio y estamos muy a la expectativa de trepar
la subida de hornillos la que nos advierten desde ya que es para valientes
,trato de no pensar mucho en eso pues la
última vez que fuimos para allí se fue en bus y no se sé sintió nada de ello.
De todos modos ya sabemos que debemos recorrer 100 km y enfocamos en ello
partimos. Hacemos buen tiempo hasta Yarabamba, tomamos unas fotos y nos
encontramos con Héctor, que solo fue a dar un paseo matutino por allí, aun no
son ni las 8:30 así que hicimos buen tiempo. Seguimos por un trecho asfaltado y
agrietado que ya empieza a subir en inclinación y para demostrar que con
cualquier cosa uno puede ponchar su llanta resulta que distraída logro pasar la
grieta por las que casi se queda toda la llanta , y al rato resulta que mordió
no quedando más remedio que cuidar la próxima cámara de las corotillas. Dónde
comienza la subida a Hornillos? es esta ? , no esta es precalentamiento ESA es
la subida a hornillos , uno sube la mirada y sabe que tiene que subir todo ese
cerro … así que tiene que proveerse bien en la última tienda. Cuando se va
subiendo a cada vuelta uno ve de más cerca las antenas de la cima , a veces uno
piensa , solo un poco más….Seguro que ya estamos a la mitad o algo y pasa un
taxi , unos dicen yo conozco esa bici y de seguro al chofer también … se sospecha
que es Vladi , bueno pero al rato se ve una camioneta detrás y resulta que es
Lechuga que está imitando el comportamiento del primero, no puede ser, siquiera
hubieran avisado ,donde quedaron los valores de cooperación , colaboración; ni
modo falta una vuelta que resulta ser una vueltaza más subida, y por fin uno ya
está en la cima mirando hacia abajo. Dominada esa subida uno emprende el tramo
de arena hacia los restos arqueológicos , el terreno se pone difícil por tramos
debido a la arena que no permite avanzar , pero el hecho de saber que uno ya se
encuentra cerca motiva a llegar pronto , solo que Joe, Lechuguita y yo tuvimos
el contratiempo de no ir a la “derecha” sino de frente bajar un tramo y por
poco no llegar a la casa de alguien en medio de la nada. Afortunadamente oímos
la voz del Condor , gracias a él que llego volando rectificamos el camino.
Llegar a Churajon es
reconfortante, uno puede distinguir claramente los escalones , los cuartos , el
templo más grande ; es decir todo este asentamiento donde hace tiempo las
personas que estuvieron aquí vivían sus días cotidianos en un lugar en el que
ahora predomina un clima seco. Aun si se tiene algo de observación se pueden
encontrar pedacillos de arcilla de sus cerámicos y restos marinos que nos hacen
preguntar cómo llegaron hasta allí. En
el templo mayor Hans da una explicación del
lugar, al tiempo que descansamos y luego nos presentamos a los miembros
que aún nos conocemos bien o es primera vez que vienen a Churajon .Nuestros
reporteros hacen un reportaje especial.
Se pone algo nublado y a lo lejos
vemos unas nubes oscuras que bien
podrían llegar por nuestro lado y comenzar una llovizna , y es cuando ya nos
disponemos a nuestro retorno . Afortunadamente no tuvimos demasiados retrasos
con las corotillas y partimos antes de las 2 . Todos estamos bastante
polvorientos , cansados y con los estómagos vacíos , sin embargo resulta una
alegría bajar a toda velocidad esa subida que hace una hora resulto una prueba
para todos.
Walter eso no es un hueso...... |
Lechuguita promocionando su venta de mochilas |
Crónica de Walter Amesquita:
Esta ruta está entre las más exigentes de
nuestro calendario ciclístico.
La convocatoria estaba para las 6 am pero ya
sabemos como es la cosa. Llegué a las 6.10 al reservorio de Guardia Civil y no
encuentro a nadie.Me sirvo un desayuno muy frugal pero vitaminizante de quinua.
Poco a poco van llegando lo aventureros con Pedro a la cabeza. Nos reunimos
como 15 patas y siendo más o menos las 6.40 iniciamos el viaje rumbo al
asentamiento pre inca.
Pedro da la ruta e ipso facto
la suelta : nos reagrupamos en Yarabamba. Así de plano y a raja tabla .Osea
que ni esperanzas de reunirnos en el cruce de Characato. De acuerdo todos (a
regañadientes?)
Iniciamos la partida y cuando estaba por
llegar al parque de la iglesia de Sabandía ,paso sobre el rompemuelles y sale
volando mi porta herramientas dejando regados mis enseres por la pista .Freno
para recogerlos y veo que se me viene encima un
tico (cuando no) que sin mediar nada pisa mi estuche. A mi lado ya se
encontraba Diveris (o algo así) que es un
nuevo pata quien me ayudó a recuperar las herramientas.
Me pregunta sobre la ruta y yo, directo y veraz
como siempre, le suelto la respuesta en prima: es tranca, fuerte, exigente y
larga. El pata no se asusta y me dice que llegará. De paso le hago saber que
todo miembro nuevo se tiene que matricular con ,mínimo, media de negras, a lo
que me responde que ya.
Seguimos la ruta citadina hasta Yarabamba, de
un tirón y nos reagrupamos en la plaza .Otros ya habían pasado el lugar
mandando a la ... la indicación de Pedro. Al Coordinador se le respeta, pues,o
¿no?.
Previo descanso y algunas placas fotográficas ,reiniciamos
la ruta con la consigna que el próximo descanso sería en la cruz. Imagínense: de
dos tirones ya estamos en la cruz .Este Pedrillo es bien bravo y realmente,
ante su antecesor Pedro el Grande ,este último era un bebé de pecho.
Bueno órdenes son órdenes y a cumplirlas .Pero
aunque esa era nuestra intención no la cumplimos porque paramos en la tienda
que queda a la entrada de Sogay. Un pequeño refrigerio y ahora sí, rumbo a la
cruz. Desde aquí empieza la subida siempre sostenida hasta la cruz .Apenas
iniciada la pendiente ya se sentía el cansancio, que se asentúa con la
refracción del calor en la pista que se siente en la cara.
Subimos y subimos cada uno a nuestro ritmo observando como la pista se retuerce
como una inmensa e interminable serpiente negra con una veta blanca en el
dorso. Por cada curva que se da, aparecen a lo lejos otras tantas que te animan
o desaniman, según el estado de ánimo. El mío estaba hasta las patas porque, tenía
la llanta trasera hasta el suelo, pero
por no quedarme atrás seguía,sin cambiar la cámara lo que hacía que no avanzara
y me cansara cada vez más y más.Felizmente,Chapatín,más conocido como Lechuga
(Alfredo para quien no lo conputa) estaba peor que yo y con serias intenciones
de abandonar. Ya éramos dos matados.
Estábamos sufriendo nuestras desgracias
cuando, derrepente nos pasa un auto con una bicicleta encima.¿Quién más podría
ser? Vlady.Bueno,no nos extrañó por que ¿cómo siempre lo hace?.Así se siguió la
trepada y arribamos al punto en donde ya estaban algunos descansando.
Entonces se aparece Vlady,todo campante,orondo
y sin pizca de rubor, afirmando que había llegado pedaleando y eso del auto,
era cuento.
Después del descanso de rigor,reiniciamos la
marcha:el lugar de reunión? el desvío a Churajón.
De la cruz,la pista tiene bajadas y subidas
alternadas hasta llegar al devío que va a Polobaya.Francamente que yo pensaba
que este era,digamos,la partida del Reto Inter,por que alguna vez lo hice.Al
preguntarle a Perico sobre el tema me dijo que no y que ya me enseñaría el
lugar exacto.Seguimos la ruta y yo,cada vez más desgastado por la llanta y
hasta pensaba que estaba frenada.Así, con estas elucubraciones dí el último
empellón ciclístico,trepé y arribé al desvío.Nos reagrupamos y,ahora sí,rumbo a
Churajón.Al frente, en un pequeño cerro se ven las siete vueltas,que es parte
del Reto.Ahora ya conozco el asunto.
La carretera es una trocha en la que encuentra
terreno suelto,arena, cenicero,empedrados pero que es bajada.El entorno es
árido y en los flancos de los pequeños cerros que rodean a la quebradilla por
la que no delizamos,hay vegetación abundante que sirve como alimento y lugar de
descanso a lo guanacos que hay en el lugar y que forman una tropa de más o
menos unos 30 ejemplares,entre machos,hembras y crías.
Encabezaba el pelotón,nuestro siempre esbelto
Pietro y tras él,Vlady y un poco más atrás
yo y Alfredo.Craso error de Vlady:por intentar
alcanzar a Pedrín,revienta cámara y fin de la carrera.Lo alcanzamos y al
llamarlo a la prudencia,en el sentido que no debe tratar de alcanzar a
Pedro,nos responde que ,éste,era mas bien quien lo seguía a él.¡Una
chanfaina!Parchamos y a seguir.
Después de salir de esa pequeña quebrada
entramos a una cañada ancha y plana que está regada por un pequeño y casi
mortecino brazo de río con poca agua,pero que da un verdor muy especial a esta
parte de la geografía.
Seguimos la tortuosa y difícil
carretera,llegando al desvío y de ahí, directo al lugar arqueológico.Durante el
trayecto se puede ver las andenerías,que sin llegar a la técnica de
construcción inca,no se dejan de admirar por lo extenso de la construcción que
abarca las faldas de los cerros que rodean al lugar.
El camino es irregular y siempre adornado con
las famosas "ccorotillas" que amenzan pinchar las llantas.A estas
horas de la correría,ya estamos cansados y achicharrados por un sol inclemente
que nos cae a plomo.Llegando a las cercanías del lugar,se pueden observar
construcciones que, en sus buenos tiempos eran viviendas con sus callejas de
piso irregular,hay algunos dinteles todavía en pie,paredes derruídas por el
tiempo y por visitantes ignaros,que
destruyen las edificaciones en las que se pueden ver aún,unas hornacinas tipo
trapezoidal,que fungían como pequeños altares o alacenas.También,en el trayecto
se ven unas especies de batanes con sus "manejas" y lo que realmente
me llamó la atención,fueron unas especies de piedras planas con una hendidura
en el centro,que nos hace comprender que eran
instrumentos líticos empleados para hacer
"raspados" de maíz (cuyo resultado sería una especie de harina) que
es muy diferente del maíz molido en la forma de su producción.
Francamente que yo, he ido varias veces al
lugar;pero nunca lo había hecho por este sendero que nos llevó Hans y por lo
tanto,recién he visto lo que les cuento.Me gustó mucho.
Sentados, esperabamos a los que faltaban,entre
ellos Andrea y Alfredo no los veíamos llegar ¿motivo?se habían desviado del
camino y se dirigían a una quebrada.Felizmente, el rey y señor de las
alturas:Cóndor (que fácilmente se le puede confundir con un habitante
churajón)los hizo llegar junto a nosotros,cuando ya estábamos en la plaza
hundida (que es uno de los cinco tipos de construcción que practicaron nuestras
culturas pre incas) observando un monolito que está enclavado en el centro de
la plaza,asemejando,según veían los azorados ciclistas,un falo y que
decían,representaba a la fertilidad,pero no a la capacidad de tener abundante
prole,sino a la fertilidad de la tierra.
Siendo esta interpretación válida,tendría que
ser así, porque los terrenos de sembrío eran del tipo secano,que sólo se
regaban con la lluvia, que como nos consta, por este sitio, sí que llueve.
En este lugar,Pedro,como siempre haciendo sus
presentaciones de altura,hace la mención de lo nuevo integrantes y Cóndor se
ganaba haciendo sus pininos en la filmación de las escenas (mientras no nos
haya sacado de cabeza y encima que nos la quiera vender) todo está bien y hasta
nos entrevistó.
El temperamento amenazaba con lluvia, por los
grandes nubarrones tipo cirro que se estaban formando por los volcanes que se
ven desde el lugar.Así que tomamos las de villadiego y a bajar del cerro.
Regresamos lo recorrido de ida y así llegamos
a la cruz,sin amenaza de lluvia.Casi de inmediato realizamos el siguiente
tramo:la bajada de Hornillos.En una de las primeras curvas,un patita casi se
sobra y se cae.De una combi que bajaba,nos pasaron la voz y pensamos lo
peor.Felizmente no fue mortal.
Con ese susto seguimos y así arribamos a
Yarabamba y al toque no más (indicación de Pedro)
seguimos hacia Arequipa.Aquí si que pagué la
factura de mi llanta.Todos me pasaron hasta que llegamos al observatorio.De
allí rumbo a un abrevadero:El norteñito.Las negritas para reponer energías y
calmar la sed.
Yo he sido testigo de muchas presentaciones de
nuevos integrantes del grupo,en donde algunos sí cumplieron la regla
matriz:poner sus chelas,previo bautizo de la bicla,tal como lo hiciera en su
oportunidad un patita en Chiguata quien se mandó sus seis negras.En otras
oportunidades,les llegó altamente la regla y encima picaron algunos sorbos;pero
ayer,el chico Diveis (o algo así) se manda a la mala sus leche de tigre para
todos,menos para el vegetariano,que ya saben quien es.Que bacán,nos recompuso y
hasta dió facilidad de palabra para mandar saludos a las chicas meseras,que
fueron respondidos amenamente,pàra hacer fluir los dotes piropeadores de los presentes y finalmente
para imponer algunas reglas de conducta para las esposas de los presentes,para
que le dejen un tiempo insoslayable y
así practique su deporte dominical.!Abrase visto¡La vida no es sólo trabajo y
más tabajo ¿no?
Con esta sabia y profunda sentencia del libro
de Carreño,es que nuestro nuevo pata,consintió en que lo más salomónico sería:
un domingo sí, el otro también y el resto para la casa.La norma la sugirió el
pendeivis del coordinador.
Con la alegría de haber cumplido la ruta y con
la calma que deja la sed apagada y las
energías repuestas,nos dirigimos cada uno a su jato y casi derramando lágrimas
prometimos encontrarnos el domingo que viene. Chao.